La próxima semana se avecinan grandes acontecimientos. Esta vez, la bajada de tipos de la Fed se produce en un momento de lo más extraño: coincide exactamente con el cierre colectivo de los principales mercados mundiales. ¿Te lo puedes creer? Es la primera vez en la historia que, cuando lanzan una bomba de política monetaria, el mercado está “durmiendo”.

Primero, hablemos de la propia bajada de tipos. El jueves a las 3 de la madrugada, la Fed anunciará su decisión sobre los tipos de interés, y media hora después Powell dará una rueda de prensa. Ahora mismo, el mercado apuesta con un 84% de probabilidad a una bajada de 25 puntos básicos; es el primer paso en su giro tras una racha de subidas agresivas. ¿Parece todo bastante rutinario? No tan rápido: por dentro, están muy divididos.

De los 12 miembros con derecho a voto del FOMC, 5 se oponen o dudan abiertamente de la bajada de tipos. Este nivel de división es el más grave desde 2019. ¿Qué significa esto? Que cada palabra de Powell en la rueda de prensa tendrá que estar cuidadosamente medida; si se muestra mínimamente más dovish o hawkish, el mercado puede estallar. ¿Cuántas bajadas de tipos más habrá en 2025? Todo dependerá de cómo se “invente” el relato Powell.

Pero aquí llega lo realmente emocionante: la bomba de relojería del calendario. El jueves 12 de diciembre, Wall Street está cerrado, las bolsas europeas están cerradas, y los futuros de oro, petróleo, divisas e índices de CME Group, todos parados. Piensa: normalmente, una decisión así a las 3 de la mañana haría que estos mercados se volvieran locos. ¿Y esta vez? No hay dónde operar.

Todas las emociones, todas las reacciones, contenidas. Los mercados spot de oro y divisas pueden moverse ligeramente, pero el dinero importante no puede entrar. ¿Qué pasará cuando todo ese impulso se libere en la apertura del viernes? La liquidez volverá de golpe, alcistas y bajistas chocarán de inmediato, y es muy probable que veamos gaps o desplomes relámpago que ponen los pelos de punta.

Así que no te centres solo en si bajan los tipos o no, que eso por sí mismo no significa nada. Lo realmente importante son tres cosas:

El tono de Powell. Si insiste en los riesgos de inflación, eso es señal hawkish: las expectativas de bajadas se retrasarán. Si empieza a mostrar preocupación por la desaceleración económica, ahí sí se pone dovish y el mercado pensará en más relajación monetaria.

El gráfico de puntos (dot plot). Es la herramienta anónima con la que los miembros del FOMC predicen cuántas bajadas habrá el año que viene. ¿La mediana apunta a 3 o a 5 bajadas? Eso determinará lo laxo que será la política monetaria en 2025, y también si ETH y otros activos de riesgo tienen margen de subida.

La reposición de liquidez al abrir el viernes. Tras la decisión del jueves, el mercado estará en vacío; el viernes llegará el “momento de la verdad”. Da igual si la noticia es buena o mala, la volatilidad se amplificará. Si llevas posiciones grandes, prepárate mentalmente y no te dejes sacar del mercado por movimientos extremos.

Esta primera bajada de la Fed ya era el gran evento del año. Ahora, con el añadido de este cierre global tan atípico, la reacción del mercado será aún más extrema e impredecible. En cripto, ETH, BTC y otros activos principales probablemente seguirán la expectativa sobre la liquidez del dólar. Si se refuerzan las expectativas de bajadas, crecerá el apetito por el riesgo y las monedas tendrán recorrido; pero si Powell deja caer que “bajamos ahora pero el futuro es incierto”, podríamos entrar en otra fase de consolidación y desgaste.

En resumen: abróchate el cinturón y prepárate para un arranque de semana de lo más surrealista.