Anoche, tras la apertura de Wall Street, Bitcoin alcanzó un pico, pero rápidamente retrocedió junto con la caída de las acciones estadounidenses. Esto sigue siendo, en esencia, una volatilidad dominada por el sentimiento.

Actualmente, el mercado se centra principalmente en la política monetaria de EE. UU. y en eventos de riesgo, como el CPI de esta noche y el aumento de tasas en Japón mañana. Sin embargo, estos factores tienen un impacto limitado en la política actual de la Reserva Federal, y las expectativas del mercado ya se han asimilado en gran medida. La caída de anoche fue más una acción de refugio antes de los datos, no una noticia negativa repentina.

A pesar de que el dólar se debilitó y el oro se fortaleció, lo que parece apoyar una futura tendencia alcista, los indicadores técnicos de mayor escala ya apuntan claramente a la bajada. En comparación con la tendencia a finales de 2021: Bitcoin, tras alcanzar su pico, osciló en niveles altos durante mucho tiempo, muchos seguían siendo optimistas, pero con eventos como el conflicto entre Rusia y Ucrania al año siguiente, la tendencia bajista principal realmente comenzó — esto no es una coincidencia, sino que es una dirección determinada por ciclos y estructuras que ya estaban definidas.

Cada vez que hay una subida rápida, suele ser una trampa para inducir compras y luego vender, no un cambio de tendencia. Antes de que aparezcan señales claras de fondo, todas las recuperaciones deben considerarse oportunidades a corto plazo, sin seguir ciegamente las subidas o mantener posiciones excesivas para comprar en la caída.#BTC